Al igual que una estrella en el firmamento, la Estrella de la Sagrada Familia de Barcelona guía la mirada de cualquier transeúnte, elevándose con imponencia sobre ciudad condal.
Si hay una obra imponente y reconocida internacionalmente de Antonio Gaudí, es sin duda la Sagrada Familia que congrega visitantes de todas las latitudes. Fue iniciada por él a la edad de treinta y un años, aunque, lógicamente, no la terminaría nunca. Gaudí cambió radicalmente el proyecto iniciado por Francisco De Paula Villar, aportando atrevimiento arquitectónico y estético a uno de los edificios más emblemáticos de Barcelona.
A pesar de la poca documentación que sobrevivió a la guerra civil española, quedó claro que Gaudí determinó que la torre de María “se coronará con una estrella luminosa de 12 puntas”, estrella que hoy es realidad y que nos llena de satisfacción porque está hecha con vidrio LuxRaff® Solid de SEVASA.
Un hito en la ingeniería de estructuras y la iluminación, con 7,5 metros de diámetro e instalado a 138 m de altura, capaz de aguantar cualquier fenómeno natural, incluso el impacto de un objeto de 100 kg a toda velocidad.
Cada proyecto singular en vidrio tiene unos exigentes requisitos funcionales, y en SEVASA nos complace poder ofrecer siempre el acabado preciso:
El vidrio LuxRaff®_Solid de SEVASA, con su capacidad de difusión de la luz (natural y artificial), antirreflejos de bello tamiz translúcido y alta dureza de su superficie ha sido elegido como la capa exterior de esta espectacular estructura.
Un punto de luz que durante el día capta y difumina la luz del sol y de noche se ilumina de blanco con tecnología LED para cada una de las 12 puntas.
Se compone de un triple laminado que combina LuxRaff®_Solid 6 mm en #cara 1 y en cara #6 un vidrio Crifusing – vidrio texturizado y fundido a alta temperatura- con una textura helada artística fabricada por el taller Gibernau.
Las piezas más grandes miden 449 x 1666 mm y las más pequeñas 635 x 356 mm, integradas en la estructura de acero inoxidable, rematando las aristas piramidales.
La estructura, con un coste de 1,5 millones de euros y 5,5 toneladas de peso, podrá visitarse desde el interior de la torre, una cavidad hueca de 60 metros con sus 800 ventanas triangulares.
Cuando Gaudí proyectó la obra, se iluminaban con lámparas de gas. Él ya tuvo la visión de que la electricidad sería el futuro, aunque no llegó a predecir todavía es la iluminación LED.
La torre de la Virgen María y su estrella es la más alta levantada hasta la fecha de la basílica, y supone el cambio del skyline del edificio, incluso de Barcelona.
Para cualquier información sobre nuestro vidrio LuxRaff®_Solid o cualquier otro producto, les invitamos a contactarnos.
Imágenes de Pep Daude©